Desde el primer momento de su tarea episcopal, san Ambrosio fue consciente de la importancia de la exégesis escriturística en el desempeño de su cargo pastoral. No en vano sus primeras obras se dedican a comentar escenas del libro del Génesis. Luego,a lo largo de los años tuvo que dedicar su atención de pastor y su producción literaria a otros temas perentorios, como los cuatro discursos de consolación ante la muerte de diferentes personajes de su entorno o la explicación del símbolo niceno dela fe y de los sacramentos cristianos.