Los textos de la Biblia forman un tejido inconsútil, aunque hecho de infinitas costuras. Es una urdimbre de hilos y piezas de muy diversas procedencias, que dejó numerosos cabos sueltos de los que exegetas y escritores no cesan de tirar para descubrir nuevas conexiones y significados recónditos. La Biblia elaboró arquetipos de las antiguas literaturas de Mesopotamia y Egipto, entró en contacto con las culturas persa y helenística y, traducida a lenguas antiguas y modernas, ha contribuido a crearuna identidad cultural tanto globalizadora como particularista, más diversificada que la clásica greco-latina. La Biblia es a la vez un canon cerrado y un libro inconcluso, abierto a nuevas reescrituras y recreaciones desde el Medievo a la actualidad. Es una obra religiosa y profana; una insoslayable «piedra de escándalo» en la que propios y extraños no dejamos de tropezar. Reseñas y críticas:- «En este apasionante volumen que ha ido tejiendo Julio Trebolle a lo largo de los años, el contenido es tan rico que hallaremos una gran cantidad de saberes fascinantes que clavan sus raíces en los orígenes de nuestro modo de interpretar el mundo y, por tanto en nuestra cultura» (La Soga, 6 de noviembre de 2019). - «Estamos ante una miscelánea de estudios que tienen a la Biblia como referente último. Pero una miscelánea verdaderamente admirable por su amplitud y profundidad. En efecto, la obra presenta veintiocho estudios que se extienden, en el plano temporal, desde los tiempos más antiguos hasta nuestros días, y en el plano espacial, desde Oriente hasta Occidente» (Vida Nueva, 12 de septiembre de 2019).